Una serie regular a dos velocidades para un round robin inédito

Una fase regular que vio su calendario atropellado por 26 partidos pospuestos por lluvia, lo que obligó a dos fechas con triple-doble cartelera, y que se disputó con cuatro equipos por debajo de .500, con solo Águilas y Toros sin sobresaltos dejó un cuadro inédito de representantes en el round robin.

Desde que la Lidom aprobó que su segunda fase sea un todos contra todos (1986-87) nunca se juntaron cuayayas, taurinos, potros y escarlatas en esa etapa que define a los finalistas. 

El round robin del torneo Juan Marichal presenta la vuelta de unos Toros a la postemporada tras cuatro con el Francisco Micheli apagado en diciembre y quedando en el sótano. También a unas Águilas que miraron al resto desde una lejana distancia todo el torneo, a unos Gigantes que apelaron a su nombre para colarse en el tramo final y a un Escogido que hizo honor a su grito de guerra: ¡Duro de matar!

En el trayecto, la cadena de resultados se llevó a dos dirigentes (Alex Cintrón con los Leones y Fernando Tatis Sr. con las Estrellas), vio a Luis Urueta (Águilas) clasificar a un tercer equipo y a José Leger y Víctor Estévez llevar a un segundo.

Vuelo alto

La gerencia de las cuyayas confeccionó un grupo que ha respondido tan bien como para lograr la mejor primera mitad (21-4) en temporada de 50 partidos y coquetear con la marca de victorias (34 del Escogido de 1995-96, Toros en 2019-2020 y Licey en 2022-23). 

El bate de los veteranos Aderlin Rodríguez, Ezequiel Durán, Alberto Rodríguez y Leody Taveras ha sonado toda la campaña. Una eficiencia que se combinó con aportes iniciales de Adael Amador, Emmanuel Rodríguez y Ángel Genao, quienes entregaron la antorcha sin que la dejaran apagar a Jerar Encarnación y Elih Marrero, con el aporte oportuno de Steward Berroa.

  • Esa batería lideró el bateo situacional con promedio de .293 con hombres en posición de anotar.

Desde el montículo, Jorge Tavárez (4-1, 1.49) resultó en el mayor acierto. Un novato de 32 años que lidera el equipo en carga de trabajo (36.1 entradas), un relevo medio efectivo encabezado por Richard Rodríguez y Jeurys Familia y un cierre de navaja de Burch Smith.

Toros, de vuelta

Jugar en el parque menos amigable para la ofensiva del circuito no fue obstáculo para los bovinos terminar como el equipo con más cuadrangulares (40), el que más carreras anotó (255) y el segundo mayor robador (65).

Detrás de ese éxito ofensivo se encuentran hombres como Bryan de la Cruz (8 HR, 40 CE y OPS de .895), Eloy Jiménez (5 HR, 19 CE y .750), liderados por un renacido Gilberto Celestino, que además de encabezar la liga en estafas (22) comandó al equipo en hits (54), anotadas (36) con una línea ofensiva de .312/.417/.393. Yairo Muñoz pegó 15 dobles y remolcó 20 vueltas.

En la espalda de De los Santos

Los Gigantes vuelven a la postemporada y no solo lo han logrado con récord negativo. También tuvieron un diferencial de carrera en rojo (-8), fueron penúltimos en extrabases (106) y cuarto en cuadrangulares a pesar del factor favorable del Julián Javier.

En ese contexto, Deyvison de los Santos cargó con la ofensiva de los cacaotaleros. El antesalista despachó 43 incogibles, cinco de ellos vuelacercas, seis dobles, llevó 28 vueltas al plato y finalizó con un OPS de .840. Johan Rojas fungió como brújula, con su defensa premium, una velocidad que le permitió robarse 14 almohadillas, despachó 39 hits, anotó 25 vueltas y remolcó 14. 

El campeón sigue

El Escogido vio comprometida su clasificación en el fallo de su relevo, que tuvo quinta peor efectividad (4.11) y WHIP (1.38) con la mayor carga de trabajo (284 entradas) de acuerdo a Winter Ball Data. 

Ese bullpen fue el más castigados por batazos de cuatro bases (20) y solo salvó nueve de las 23 victorias cuando el aguilucho logró 20 y el nordestano 17. Fue el más bateado y el que más carreras toleró. 

Los melenudos tuvieron la peor marca en partidos definidos por una vuelta (3-10) y sus cerradores estropearon 13 partidos que recibieron delante (blown saves).

Pero sus bates respondieron con casi cinco carreras por choque (4.96), fueron terceros en imparables (427), vueltas anotadas (248), sus corredores lideraron la liga en robos (67) y terceros en total de bases (620).

Los veteranos Yamaico Navarro, Sócrates Brito, Junior Lake, Franchy Cordero y Erick González comandaron esa producción, con aportes del joven Héctor Rodríguez, de Jonathan Guzmán y Alexander Canario. Lake viene de robarse 17 bases y disparar 47 incogibles, con ocho dobles y 33 anotadas.

A reponer munición

Este miércoles 23, a partir de las 12:00 del mediodía, los cuatro clubes podrán cerrar sus huecos con los sorteos de reingresos de nativos e importado para la reanudación del próximo sábado.

Robinson Canó se declaró disponible para ir al sorteo. De ese núcleo verde también puede generar mucho interés Raimel Tapia, Ismael Munguía y los lanzadores Esmil Rogers, Enny Romero, Oscar de la Cruz y Neftalí Féliz.

Del Licey se apuntaron Cristhian Adames, Gustavo Núñez, Mel Rojas Jr., y Francisco Mejía. También los lanzadores Enyel de los Santos, Jonathan Aro, Jean Carlos Mejía y Ulises Joaquín. NPerez@diariolibre.com

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